Nielsen, blogs y usabilidad

Si hace unos días Jakob Nielsen publicaba los diez errores de usabilidad en la web de 2005 (lo comentamos aquí), esta semana se dedica a los errores de usabilidad en los blogs… Como de costumbre, lo mejor es leerse el texto original, pero he aquí los diez errores, con su correspondiente comentario, si fuera o fuese necesario:

1. No hay biografía del autor. Culpable. El propio Nielsen ya dice que, si no se trata de un «bussiness blog», no es imprescindible, pero mejora la credibilidad. De hecho, yo creo que el mío la empeoraría :-P.
2. No hay foto del autor. No tan culpable (la prueba). Pero bueno, como hoy mismo me han hecho una que me encanta, y aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid,
   
   De hecho, habría hecho falta un ojo de pez para observar el caos que es mi mesa, que tiene mucha más gracia que yo… Como corresponde a todas estas fotos, obsérvese que tengo las manos en actitud de teclear… mientras en la pantalla hay un navegador con una página web. La foto, de Toni (que se ha jugado el físico para conseguirla, como podréis imaginar).
3. Títulos poco descriptivos. Mayormente inocente (gracias a la insistencia de Isma). También insistía sobre el tema Cory Doctorow en un punto de la entrevista que le hice.
4. Enlaces que no dicen dónde van. A veces sí, a veces no. Cierto que es útil etiquetar correctamente los enlaces, pero hay veces que uno no escribe para Google, sino para sus lectores habituales, o para algunos de esos lectores habituales, y claridad no es el objetivo. Al fin y al cabo, es mi blog, y hago lo que quiero, ¿no?
5. Las entradas de más éxito están enterradas (vaya, que quien llega al blog por primera vez no tiene manera de ver qué escribes de bueno). Inocente casi del todo: en la barra lateral de la ‘home’ de otro blog más hay un maravilloso ‘Entradas populares’ que sirve precisamente para eso, para hacer de ‘top 10’ del blog (más información). Claro está que, con mi velocidad y eficiencia habituales, me falta ponerlo en las páginas de las entradas individuales, las categorías y los archivos, que, al fin y al cabo, es a donde llega la gente. Todo se andará… O no, que me conozco.
6. El calendario es la única navegación. ¿Calendario? ¿Qué calendario? Bueno, de hecho, también puede uno moverse por categorías, por autores, buscar, y saltar de diez en diez entradas en las páginas con más de una, o de entrada en entrada… Aun así, soy poco homogéneo, y es de los pocos (espero) sitios en que quedan textos en inglés en el blog. Otra cosa en la que debería trabajar…
7. Frecuencia de publicación irregular. Hey, que esto es un blog, no una revista… Al fin y al cabo, para solventar eso están los lectores de ‘feeds’, ¿no?
8. Mezclar temas. Pues igual mareo, sí. Pero es que yo soy así…
9. Olvidar que escribes para tu futuro jefe. De hecho, el actual me lee (muy de vez en cuando, cierto es). No sé si mi futuro jefe se hará una buena idea de quién soy con el blog, pero una buena vista parcial sí tendrá, ¿no?
10. Tener un dominio propiedad de un servicio de blogs. Por aquello de que se pierde el control. Inocente.