Categoría: Propiedad intelectual

  • Introversy: el ‘pastiche’ definitivo

    Llevaba uno mucho tiempo sin colgar un MP3 en el blog… Hoy toca romper la tendencia, con Introversy (MP3, 48 kbps, aprox. 20 MBs), de Soulwax (o 2 many dj’s, o como deseen llamarse este par de belgas). Por tres motivos:

    1. Que me caen la mar de bien. Me compré su As Heard on Radio Soulwax, Pt. 2 (el único editado legalmente en España, creo) en su momento y me ha sabido fatal cada vez que me los he perdido cuando han venido a Barcelona a montar el espectáculo… A mí siempre me han gustado los artesanos de la cosa musical, qué le vamos a hacer.

    2. Que este Introversy es el colmo del enciclopedismo. La premisa: a principios de febrero el DJ de la BBC Rob da Bank había de faltar un día. Como esto es la BBC (qué envidia), llamaron a Soulwax para hacer la sustitución de rigor para las dos horitas del programa. Y como Soulwax son Soulwax, para la primera hora de dicha sustitución prepararon el dichoso Introversy. 60 minutos para acumular, sin solución de continuidad, muchas, pero que muchas, ‘intros’ de piezas musicales. ¿Que cuántas son muchas? ¿Para sesenta minutos? Pues… nada más y nada menos que… cuatrocientas veinte canciones diferentes. Sí. Eso. No es una errata. Siete por minuto. Durante sesenta minutos. A piñón. Básicamente, el ‘tracklist’ es un ‘quién es quién’ de la música pop (anglosajona) de los últimos treinta cuarenta y cinco años. En serio. Si te tomas la molestia de escuchar el MP3 y no reconoces al menos cincuenta pistas, es que no te gusta el pop ni el rock, o que te has pasado en Marte las tres últimas décadas (otra cosa es que te dé tiempo a poner nombre a muchas de esas pistas que reconozcas antes de que los belgas hayan ‘pasado palabra’…). No es el Raiding the 20th Century de DJ Food en cuanto a nivel cultural, pero le gana por goleada a todo ‘mashup’ que se menee en cuanto a potencia, cantidad y ritmo sostenido…

      ¿Cuál es la magnitud de la cosa? Para hacernos una idea, me ha costado poco más o menos tiempo el mismo tiempo localizar el torrente, descargarlo, escuchar las dos horas del programa, recortar el MP3 y subirlo… que hacer esta lista de Spotify, que no tiene ni doscientos cuarenta de los temas de la mezcla… (en mi descarga diré que he buscado los 420, y que eso es un ratillo…)

    3. Y que, finalmente, es un gran ejemplo de lo que le pasa a la legislación de la propiedad intelectual. A siete piezas por minuto, no creo que nadie defienda que lo que ha hecho Soulwax no es una obra de arte (que puede gustar o disgustar más o menos, desde luego, pero con entidad propia y valor artístico). Pero si podemos disfrutar de él es, primero, gracias a la licencia de la BBC para emitirlo y, después, gracias a las maravillas del P2P, ya que ninguna discográfica, por enorme que sea su ejército de abogados, se atrevería jamás a intentar negociar los derechos de la obra, que sería, sin duda, el disco más caro de la historia, en caso de llegar al mercado. Y eso, me parece a mí, debería ser motivo (un motivo más, de hecho) para darle una capita nueva de pintura a la legislación existente…

    PS 20090312 Abundando en el último punto de la lista, según apuntan por aquí (vía el Delicious de Brian Lamb), la inflación del precio de licenciar ‘samples’ para su uso comercial (que andaría por los 10,000 dólares de media (Introversy, pues, costaría más de cuatro millones de salida, solo en licencias)) es tal que está alterando las bases de la música hip hop comercial, que tira de dichos samples cada vez menos…

  • Localiza usos de tus imágenes con TinEye

    No sé si recordaréis la historia de mi foto de la torre Agbar, la que colgué aquí, cuya historia conté aquí y que, en resumen, suele salir en los primeros lugares cuando uno busca ‘Torre Agbar’ en Google Images… pero no en la entrada original de mi blog, sino por media web…

    Bueno, en cualquier caso, cuando he leído sobre la existencia de TinEye, un «motor de búsqueda inversa de imágenes» en Confused of Calcutta, me ha faltado tiempo para registrarme y hacer la prueba…

    ¿Qué es un «motor de búsqueda inversa de imágenes»? Uno al que tú le entras una imagen (bien subiéndola, bien dando una URL) y busca sus usos por la web. Difícil, ¿no? ¿Funciona? Probemos:

    TinEye localiza múltiples usos de la imagen, a pesar de haber sido reescalada, compuesta con otras imágenes o editada de múltiples otras formas
    Bastante bien, ¿no? Resiste a reescalados y todo tipo de ediciones

    Notable pero no excelente: le he pasado un uso de la foto y (i) no ha sido capaz de llegar a mi blog y (ii) ha devuelto algunas imágenes que, si bien similares, no son la mía (insisto que lo conseguido es de nota y me ha dejado con la boca abierta).

    Hagamos una nota aparte ‘condenatoria’. Si cuelgas una foto en la web, el mejor halago que te pueden hacer es usarla. Y sabes que por mucho que le cuelgues una licencia que solo exige la atribución para usos no comerciales, alguien se la va a saltar a la torera porque sí, tarde o temprano, bien por desconocimiento o por cara dura. Apunto aquí a dos casos de estos que me tocan la moral. El primero, una inmobiliaria (ownerdirectbarcelona.com, no me apetece enlazarles) que usa la imagen en su web, recortada y pequeñita, pero sin atribución:

    Captura de la web ownerdirectbarcelona.com
    ownerdirectbarcelona.com

    El segundo uso ‘al-menos-discutible’, del mismo estilo, me duele más:

    La dichosa foto, compuesta con otras
    www.20minutos.es/data/img/2008/04/03/790404.jpg

    Sí, esa imagen (está ‘hotlinkada’, me siento con derecho a hacerlo) ‘vive’ en 20minutos.es. Por lo que entiendo, se ha usado en múltiples ‘sidebars’ de piezas variopintas, aunque las URLs que devuelve TinEye ya no la usan. Por lo que veo en esas imágenes, no es costumbre del diario poner los créditos de la imagen (poner tres créditos en una imagen de 544×120 tendría su aquel, ciertamente). Y digo yo, ¿no tendrán en 20 Minutos acceso a tropecientas imágenes de la torre por cuyos derechos, seguro, ya han pagado religiosamente? En fin…

  • Intrusión de GMail vía Google Documents

    Igual hace tiempo que esto se sabe, pero a mí acaba de ocurrirme.

    Recibo un correo electrónico a mi cuenta de GMail con un documento adjunto (un .ODT, para ser más precisos). Como sabía que era un documento corto y provisional, no lo guardo en ninguna carpeta y decido abrirlo directamente desde GMail con la opción de «Abrir como documento de Google».

    Al cerrar el documento, recibo un correo firmado por Google donde me dice (traducción libre, énfasis añadido):

    Ha utilizado el enlace de Gmail «Abrir como un documento de Google» para ver el adjunto titulado «El título del documento adjunto».

    Haciendo esto, has guardado una copia editable en línea en Google Docs directamente en http://docs.google.com/mi-cuenta-en-google-documents

    Para mi pasmo, veo que a continuación me dicen ¿Preguntas? Haz un tour o visita el Google Docs Center. Lo «bueno» es que el tour enlaza a una página que da un error 404.

    Increíble. En alguno de los EULA aceptados pero jamás leídos, ¿habré dado yo permiso a Google para guardar «sin mi permiso» (nótese la contradicción) mis adjuntos en Google Docs? ¿Se podrá desactivar esa opción?

    Por supuesto, he tenido que ir a mi cuenta de Google Docs y, desde allí, borrar el documento, y además, he tenido que vaciar la papelera.

    Increíble.

  • Contra la piratería, torturemos al cliente

    Es la idea, ¿no? Acabo de poner un DVD que me compré el otro día en el reproductor (Shine a Light, Martin Scorsese y los Rolling Stones, muy recomendable). 18 eurillos en la Fnac, me costó, creo recordar.

    No sorprenderá a nadie saber que, de salida, me he comido un maravilloso anuncio contra la piratería. Pero es que después de la piratería me he tenido que tragar unos cuantos trailers de película. Que no me he podido saltar. A trozos, el reproductor ni siquiera me ha permitido ponerlo en avance rápido… 4 minutos de mi vida. Cuatro minutos de la vida de cada una de las personas que paguen por el dichoso DVD. Y como mínimo hoy los trailers tienen una cierta vigencia. Dentro de cuatro años, por ejemplo, ese trailer será la peor plataforma de marketing posible. Afortunadamente, estaba solo en casa. Si no, tendría que haber aguantado como alguien me llamaba imbécil por pagar para que me insulten primero y me tomen el pelo después. Con razón.

    ¿Es alguien consciente del esfuerzo que me llevaría ‘ripearlo’ a un formato como H.264, colgarlo después en la red y ahorrar esos cuatro minutos a tantísima gente? Aproximadamente ninguno. Pero se seguirán preguntando por qué la gente lo hace…

  • La RIAA abandona las denuncias… pero no el acoso

    O al menos eso cuenta el Wall Street Journal. Copio-traduzco-y-pego:

    Los críticos dicen que la ofensiva legal hizo poco por parar la marea de música descargada ilegalmente. Y creó un desastre de relaciones para la industria, cuyas demandas apuntaron, entre otros, a varias madres solteras, un muerto y una niña de trece años.

    A partir de ahora la RIAA intentará la vía de «colaborar» con los proveedores de acceso, notificándoles cuando detecte usuarios en sus redes participando en el P2P, y serán dichos proveedores los que avisen al usuario y le acaben cortando el acceso «a la francesa» si no ceja en su empeño.

    No veo yo que sea un cambio muy positivo. Parece, más bien, como si la industria se oliese que esto de pedir a los proveedores que identifiquen a sus usuarios tiene poco futuro legal y actuase en consecuencia.

    Seguiremos informando…

    PS 20081223 Interesante artículo en Wired.com sobre el tema…