Bueno, de hecho, no sé exactamente qué quieren decir (aunque en general la tonadilla me gusta bastante :-) ). Me gustó la melodía en diciembre, y me volvió a gustar el viernes, cuando me pasé por el Centre d’Art Santa Mònica para escuchar un rato a Escolar y a David Bravo (a este último no le había visto nunca y, desde ya, lo añado a la lista de «grandes oradores»).
Reza la página de inicio de Copyfight:
Si siempre hubiera existido la propiedad intelectual, la humanidad no habría conocido la epopeya de Gilgamesh, el Mahabharata y el Ramayana, la Ilíada y la Odisea, el Popol Vuh, la Biblia o el Corán.
Voy a diferir. El concepto de propiedad intelectual, entendida como ‘paternidad intelectual’ si se quiere (o ‘maternidad’, desde luego) me parece difícilmente atacable. Si la idea la he parido yo, la exploto como me da la gana (o al menos quiero tener ese derecho), y quiero que se me reconozca esa paternidad. Y los chicos (y chicas) del Copyfight, también. No se explicaría, de otra forma, que se trajeran en diciembre a Lawrence Lessig a defender las licencias Creative Commons, que me permiten hacer valer mi propiedad intelectual de un puñado de formas diferentes.
Y el concepto de ‘propiedad intelectual’ no está tan reñido como podría pensarse con la existencia de ricas tradiciones orales como las que citan en la página. Que el trovador de turno pueda explicar la historia que ha inventado antes alguien no quiere decir que ese creador no pueda ejercer su propiedad intelectual (y sé perfectamente que no es el creador original, sino docenas y docenas de creadores que han ido añadiendo capas y más capas a la primera versión de la historia).
El problema, pues, opino, no es la existencia de un ‘copyright’, que está en su derecho de existir, y al que puede acogerse cualquiera cuando lo desee. El problema tampoco está en la existencia única del ‘copyright’, ya que ya disponemos de una buena cobertura con las Creative Commons, GPLs y demás, y cada cual es libre de elegir la que desee.
Y cuando estaba uno intentando dar una explicación de cuál es el problema, me entero por Escolar que el inefable Pedro Farré lo ha explicado, perfectamente, en una sola frase:
El sector tecnológico quiere cargarse la propiedad intelectual y expulsar de la cadena del audiovisual a agentes tradicionales, como los productores o los distribuidores, para entrar ellos y pagar lo menos posible.
Claaaaaaaaaaaaaro. Vamos, que lo que defiende la SGAE no es a los artistas y creadores. No. La SGAE defiende su confortable posición de «agente tradicional» en la «cadena del audiovisual», evitando que se pague «lo menos posible». No sea que el sistema se vuelva eficiente, los consumidores gastemos menos, y los artistas ganen más (y alguien deje de chupar del bote). Si en vez de hablar de la «cadena del audiovisual» (qué propio, lo de hablar de cadenas) habláramos de un ser vivo, a lo que hace la SGAE le llamaríamos enfermedad…
Y ese sí que es un problema. Que alguien cuente con el apoyo de los gobiernos (no sólo hay SGAEs en este país…) para perpetuar ese modelo de parasitismo.
Y ya puestos, un apunte más. Cuando la SGAE llama pirata a alguien, la contestación debería ser ¡Corsario!
. Porque dice la RAE que un corsario es el que anda al corso
, y ese corso es la campaña que hacían por el mar los buques mercantes con patente de su gobierno para perseguir a los piratas o a las embarcaciones enemigas
. Y si esa no es la precisísima definición del canon de CDs y DVDs, que venga alguien y me lo explique.
Podras proponrselo formalmente a David Bravo, porque «Corsario!» es una respuesta mucho ms gil y dinmica que «Pero el artculo 31puntotal de la LPI dice que…», y adems es ms difcil de interrumpir. ;)
Aparte, creo que entre la propia gente de Elstico hay quien aboga por la «apertura» del copyright con CCs, GPLs y dems, como t dices, y quien est por abolirlo por completo. Lo importante, como deca Casacuberta (era l?), es enfocar los esfuerzos contra el enemigo comn, no disolverse en rencillas internas por un qutame all ese sharealike…