Ese es el título del último (¿próximo?) y cuarto disco de Garbage, que ya corre por las redes P2P (y que, por tanto, ya estoy escuchando). Voy sólo por la canción cinco, y habrá que darle unas cuantas pasadas, pero creo que ya se puede afirmar que, primero, a Garbage se le han caído los sintetizadores y, segundo, que me siguen gustando mucho.
Lo que no voy a entender jamás es a qué juegan las discográficas. Lo que estoy oyendo lo ha filtrado alguien que trabaja para ellos, y me juego lo que haga falta a que es la versión difinitiva. Y si ya tienen la versión definitiva, ¿qué les cuesta colocarlo en iTunes y demás tiendas? Mi descarga no les va a costar ni una venta, porque me pasaré religiosamente por caja a por mi disco, pero que salga primero ‘en ilegal’ sí va a hacer que se reduzcan sus ventas… Las redes P2P son, en mi modesta opinión, un enemigo importante para las discográficas, pero mucho menos que las propias discográficas.
[Escuchando: Bleed Like Me – Garbage]
Me quedo con la ltima frase. Las discogrficas tienen muchos enemigos, pero el primero, desde luego, son ellas mismas. Y si no lo son, ya estn las sociedades encargadas de cobrar los derechos de autor para recoger el testigo.