Después de tanto tiempo, las cosas se siguen reduciendo a eso: gana la mejor interfaz de usuario. Dice este artículo de mobitopia, entre otras muchas cosas, que un estudio ha encontrado que los usuarios de móviles Motorola envían una media de 12 SMSs al mes. Los usuarios de Nokia, 36. ¿Por qué? Porque los Nokia son más fáciles y rápidos de usar. Buen diseño, mucho consumo.
Dice también que un día le dejó el móvil (un Nokia, precisamente, 3650 por más señas) a alguien para que consultara un número de teléfono. Y que este alguien se rindió al cabo de un rato. El mismo alguien que, años antes, no había tenido ningún problema para consultar un teléfono en una Palm IIIx.
Y menciona, además, este artículo de The Register en el que alguien se sorprende, al comparar móviles Series 60 (como el 3650) y UIQ (como el SonyEricsson P900) contra el Treo 600 (un teléfono con Palm OS), y decidir que le gustaba más el Treo.
Está claro que, de salida, el usuario medio de móvil caro no se va a comprar un Treo. No tiene el atractivo de marca que tienen Nokia, Sony, y hasta Microsoft. Pero si Palm sobrevive hasta que ese usuario medio se vuelva a cambiar de teléfono, después de haber comparado, entonces, y sólo entonces, y sólo a lo mejor (a falta de la sorpresa que anunciaba Hawkins), PalmOne podría llegar a algún sitio como fabricante de teléfonos de gama alta.