Ben Hammersley escribe un artículo interesante en The Guardian: Swift and offshore. lo del ‘offshoring’ es una cosa que funciona hace tiempo: es más barato tener un ‘helpdesk’ en Marruecos que en España, o un equipo de programadores en la India que en California… y como esto de las telecomunicaciones funciona, las compañías contratan fuera. En perjucicio de los trabajadores locales, en beneficio de los trabajadores ‘de ultramar’ y de la cuenta de explotación de la empresa (que no de los clientes, habitualmente, que seguimos pagando como si el trabajo lo hiciera alguien con sueldo de futbolista…).
Ben dice que no sólo son las empresas las que se pueden beneficiar de la idea, y apunta a sitios como Rent A Coder o template kingdom, en los que uno (o su pequeña empresa) puede encargar, respectivamente, y como podría imaginarse, un trabajo de programación y una plantilla web.
Dejando de lado las bondades o maldades del ‘offshoring’, está bien pensar que no son sólo las grandes empresas las que pueden sacar tajada….