Pues sí, ya hemos caído. La carne es débil… A falta de probar más a fondo, el cacharrito mola (te lo miras una y otra vez y no puedes evitar preguntarte cómo habrán metido tantas cosas ahí dentro) pero no está exento de defectos (es exasperantemente lento de reflejos, por ejemplo).
Seguiremos informando…
Deja una respuesta