Esta semana debo tener unas especiales ganas de mirarme el ombligo. Ayer hablaba de los comentarios de este blog, hoy de las visitas. No tanto de su número (aunque la verdad es que estoy encantado con las que tiene el blog) como con su distribución. Uno no es estadístico, pero como esto de las colas largas, leyes de la potencia y de Pareto y demás cosas de estas está de moda, me he dedicado a hacer un experimento. Y durante unos 25 días me he dedicado a contar qué URLs de otro blog más eran visitadas, y cuántas veces (vale, no lo he hecho yo, lo ha hecho Power Phlogger).
Y los resultados no son inesperados, pero sí espectaculares:
Cierto, no se entiende. Lo explico:
- En la tarta de la izquierda, las URLs ordenadas por el número de visitas que ha tenido cada una, de manera logarítmica: 4 han pasado de 1000 impresiones, 19 han estado entre 100 y 999, 158 entre 10 y 99, y 392 entre 1 y 9. Eso da 573 URLs. Teniendo en cuenta que hay una URL por entrada y al menos otra por categoría, autor, mes y día, estamos hablando de más de 1000 URLs no visitadas, en un periodo de aproximadamente 25 días.
- En la tarta de la derecha, la cantidad de impresiones acumulada por cada categoría de URL: las 4 páginas ‘pata negra’ acumulan cerca de 14,000 impresiones, o el 54% de las páginas vistas, las 19 ‘de segunda clase’ generan el 22%, las 392 ‘de tercera’ el 19%, las 392 ‘de cuarta’ un ridículo 4%, y las más de mil restantes, exactamente el 0% (no suma 100% por errores de redondeo).
Ciertamente espectacular.
Falta matizar que las cuatro URLs pata negra incluyen dos instancias del índice: la página http://obm.corcoles.net/ y http://obm.corcoles.net/index.php+parámetros (esta última le encanta, por ejemplo, a Google Images, para mi desesperación, ya que no tengo demasiada forma de ver de manera automática a dónde van a parar). Entre esto y las visitas de las páginas de archivos y categorías podemos concluir que la cantidad de contenido que realmente genera visitas no es tan ridículamente pequeña como muestran las tartas, pero aun así, no deja de ser un dato muy contundente.