Post sobre los sobre los problemas de un tipo con su feed RSS. O mejor, sus problemas por culpa de los malos lectores de RSS. La cuestión es que el protocolo RSS, presuntamente, funciona así: el lector le dice al sitio web ‘aquí estoy’ y pregunta cuándo se han hecho los cambios más recientes. Si no ha habido cambios desde la última visita, el resultado es un mensaje 304 – No modificado, y fin de la historia. En caso contrario, el sitio sirve el fichero que contiene los últimos posts y un mensaje 200 – OK (que es el que se devuelve siempre que se sirve lo que se ha pedido correctamente). En este blog, por ejemplo, ha habido 364 304s en los últimos .
El problema viene cuando 1. el lector no hace caso si el sitio dice que no habido cambios desde la última visita y 2. el sitio tiene muchas visitas. ¿Por qué? Porque los lectores de feeds tienen la manía de visitar los sitios muchas veces al día (1 por hora, por ejemplo). Eso quiere decir que tenemos muchos vistantes que nos vistan contínuamente, previo borrado de la caché. Resultado: el consumo de ancho de banda crece, en vez de reducirse.
Las soluciones:
- Usar lectores RSS respetuosos.
- Usar servicios como Bloglines, que acumulan muchos usuarios en un solo lector.
Y si no… Pues lo que le pasa al del enlace: el ancho de banda del día agotado a las 12 del mediodía. En los comentarios del post hay unos cuantos enlaces de interés sobre el tema.
Disclaimer: como siempre, todo viene de una lectura en diagonal y una tremenda sobresimplificación.