Photoshop en la web con Photoshop Express

El logotipo de Adobe Photoshop Express

No es que Adobe Photoshop Express sea claramente superior a rivales como Picnik, por ejemplo, pero la atención al detalle (obsérvese el ‘favicon’, en la línea de los iconos CS3 de los programas de la casa) y la imagen de marca de Adobe le dan una ventaja notable (claro que la integración de Picnik con Flickr, por ejemplo, también es un detalle a tener en cuenta)…

Captura de pantalla de la interfaz de Photoshop Express

Como con el resto de aplicaciones realizadas con Flex, la capacidad de integrar dentro de una aplicación web elementos que hace unos años habrían resultado sorprendentes en una de escritorio es bastante espectacular. Comenta Ryan Stewart, además, que se está cociendo una versión offline gracias a Air, que muy previsiblemente será un buen ejemplo de las capacidades de la plataforma y añadirá aún más características de interfaz rica.

Nota 1. A pesar de que la web dice que es «U.S. only», funciona perfectamente fuera de Estados Unidos. Solo hay que ser un poco creativo a la hora de teclear la «@» de la dirección de correo, puesto que la aplicación asume un teclado estadounidense. O sea que podéis probar en http://www.photoshop.com/express/index.html.

Nota 2. La captura de pantalla… está hecho con Photoshop CS2.

Mozilla Prism, «site specific browsers» ad hoc

La disyuntiva es de las que está marcando 2008: ¿aplicaciones web como hasta ahora o aplicaciones de escritorio (o para el móvil) conectadas? Parece claro, al menos de momento, que las modas actuales indican que la aplicación de escritorio «de toda la vida» ha muerto. Igual resucita con el próximo cambio de paradigma, pero parece que eso es algo que no va suceder a corto o medio plazo. Los datos viven «in the cloud» y una parte de la potencia de cálculo también.

Las ventajas de las aplicaciones web son bien sabidas: siempre corremos la versión más actualizada del software, no hay instalación (si la velocidad de nuestra conexión a internet es suficiente, que si no es como si instalásemos cada vez) y no importa en qué sistema operativo estemos: todos tienen un navegador lo suficientemente sofisticado como para actuar de máquina virtual. Ese último punto, además, es una bendición para el desarrollador, que programa una sola vez para todas las plataformas, gracias a las bibliotecas y frameworks que corren por ahí.

Las aplicaciones conectadas, por su parte permiten una riqueza en la ‘user experience’ y en la interacción con el sistema operativo que la capa del navegador limita muy seriamente. A cambio, cuanta más ‘lógica de programación’ viva en el cliente más nos tenemos que preocupar de múltiples versiones y de mantener una API que hable con todas ellas y, si queremos correr sobre múltiples sistemas operativos no nos queda (o no nos quedaba, mejor) más opción que, en el mejor de los casos, compilar múltiples veces…

El año pasado comenzamos a ver dos intentos de solución al problema. Por un lado, Adobe anunciaba Air, que permitía aprovechar las habilidades adquiridas en el desarrollo de aplicaciones AJAX/Flash/Flex y añadía unas cuantas APIs para hablar con el escritorio y un proceso de empaquetado que, vía máquina virtual, nos permitía hacernos un hueco en el escritorio (de momento Windows y MacOS, en breve Linux).

Por el otro, la Mozilla Foundation lanzaba a través de Mozilla Labs Prism, que toma un camino similar: quitemos al navegador todo lo que sobra para correr aplicaciones (barras de menú y navegación, para comenzar) y añadámosle las cosas que le faltan si es necesario (un motor de base de datos, por ejemplo) y obtendremos el mismo resultado. Más detalles aquí.

El viernes se anunciaba nueva versión de Prism (vía), con una novedad interesante: extensión para Firefox (solo funciona con la beta 3 de Firefox 3 y versiones posteriores) que permite a cualquier usuario empaquetar cualquier aplicación web para ejecutarla en el escritorio. Así, por ejemplo, podemos empaquetar el correo de GMail o el calendario de Airset:

Captura de pantalla de la aplicación Prism GMail

No vamos a conseguir funcionalidades que no estuviesen en la aplicación web original (que podrían añadirse, eso sí, mediante scripting y, como apuntan en Ars Technicacomo apuntan en Ars Technica, con los mismos privilegios que una extensión y pudiendo, por tanto, acceder directamente al sistema de archivos y otras actividades normalmente no disponibles desde una aplicación web), pero a veces va bien sacar determinadas aplicaciones del navegador.

El administrador de tareas muestra dos instancias de Firefox. La segunda, que consume 120 megas, es el navegador. La primera, que se queda en cincuenta y tantos, es la aplicación de GMail

De momento faltaría que las aplicaciones se identificasen mejor, al menos en Windows, que eso de tener dos procesos corriendo con el mismo nombre no es exactamente la mejor política…

Aplicaciones web offline, una de las tecnologías de 2008

Y no hablamos de «tecnologías web». Technology Review, una revista publicada por el MIT, publicaba el otro día su último número, dedicado a las diez tecnologías emergentes de 2008 y, junto a cosas como los enzimas celulolíticos o la conectómica (ahí es nada) han destacado las aplicaciones web offline.

Como mínimo, todo un triunfo de relaciones públicas para Kevin Lynch and company, que dentro de nada lanzan oficialmente AIR, la teecnología de Adobe para crear esas aplicaciones web offline a partir de proyectos HTML (con o sin AJAX), Flash y Flex.

Por cierto, que a finales de marzo comienza el tour europeo de presentación, que esta vez parará en Madrid, y no en Barcelona, con lo que dudo mucho que pueda asistir :-(.

(Imagino que a los lectores habituales de la casa también les pueden interesar los temas de reality mining o wireless power, como mínimo.)

¡¿Vuelve Director?!

Im presionante. Si uno, hace 20 minutos, hubiese tenido que llorar la desaparición de un producto Macromedia tras su adquisición por parte de Adobe, no lo habría hecho por Freehand sino por Director. Un producto que ahora mismo se puede encontrar en la web de Adobe solo enterrado a cinco clicks de distancia de la ‘home’ (hay una cosa que se llama Scene7 OnDemand y que está a un click, para que se hagan ustedes una idea) y que no tiene ni versión 8 ni CS3, sino que aún anda por la MX 2004 (más de tres años sin actualización para un producto de software, convendrán ustedes, son más que suficientes para que el médico de turno certifique la muerte). Pues bien, parece que mañana Director resurgirá de sus cenizas en la Game Developers Conference, en la que Adobe anunciará su versión 11…

Im presionante, insisto. Seguiremos informando.

Comet: ¿BlazeDS, XMPP?

Hace unos días me enteré de la existencia de una nueva palabrota que añadir al diccionario del desarrollador web: Comet. Que viene a ser un paso más allá de AJAX: con AJAX es el cliente el que va pidiendo información al servidor ví­a HTTP. Un modelo que se ajusta a las necesidades de un programa de correo electrónico, pero no a las de la mensajerí­a instantánea: si cada cliente le pregunta cada segundo al servidor si tiene mensajes nuevos, este se fundirí­a. Con Comet, o bien se establecen conexiones persistentes usando otros protocolos menos exigentes con el servidor o bien se dota al servidor de un mecanismo para abrir una conexión con el cliente. Una combinación de AJAX y Comet, por ejemplo, es la que posibilita la existencia de algo como Meebo.

Pues bien, el otro dia Enrique Duvós, «Senior Platform Evangelist» de Adobe Europa, presentaba en el MIF onsite las soluciones de Adobe para el tema, LiveCycle Data Services y BlazeDS (esta última, en código abierto), que tienen bastante buena pinta. Y también esta semana en ReadWriteWeb comentaban la posibilidad de usar XMPP (el protocolo sobre el que funcionan Jabber y Google Talk) para el mismo fin.

Aunque ambas tecnologí­as me parecen muy interesantes (y sin duda cada cual aporta sus problemas y limitaciones), las posibilidades que apunta XMPP en un mundo de dispositivos conectados me parecen apasionados. No serí­a descabellado llevar en el móvil, o en una PDA conectada, una suite de aplicaciones que, disponiendo de acceso a la red, comunicara a su ‘lista de contactos’ que está en marcha y ofreciese servicios como acceso a audio y ví­deo, o a pequeñas bases de datos que se sincronizasen con un servidor central de manera autónoma..

Muchas posibilidades, y muy interesantes. De golpe el servidor web que sacó en beta Nokia para sus móviles más potentes (véase) me parece bastante más interesante…