Aquí están intentando componer el ‘top cien’ de la ciencia ficción encuestando al personal, que dispone de la posibilidad de dar su voto a sus diez obras favoritas. Uno no es un muy buen lector de ciencia ficción (de hecho, es que no es un buen lector, y punto) pero, de todas formas, mis seleccionados:
- De Douglas Adams, La Guía de la Galaxia para Autoestopistas, una receta infalible para reir y sonreir.
- Del enciclopédico Asimov, los cuentos de Yo, Robot, la ‘space opera’ Fundación y la respuesta que le dio el propio Asimov, Los Propios Dioses.
- Las Crónicas Marcianas, de Ray Bradbury.
- Neuromante y Burning Chrome, de William Gibson (sigo opinando que su mejor libro es Pattern Recognition, pero a mí no me parece ciencia ficción).
- Hard-Boiled Wonderland, de Murakami (absolutamente inclasificable y el único libro de la lista que he leído recientemente).
- Y de Neal Stephenson Snow Crash y The Diamond Age, probablemente mis dos libros favoritos de entre estos diez (de nuevo, como con Gibson, su mejor libro, el Criptonomicón, se escapa de mi criterio de lo que es ciencia ficción).
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