Finalmente he caído en la tentación: ayer pasé por caja y me llevé a casa (bueno, al bed & breakfast) un maravilloso iPod Touch de 16 gigas. Y, la verdad, casi todo lo bueno que había leído sobre él es cierto. No obstante, algunas observaciones:
- ¿¡Cable USB y auriculares blancos!? El touch es negro. El blanco de los cables le sienta, como suele decir mi madre, como a un santo dos pistolas. Que este tipo de cosas se le toleren a Apple es una demostración fehaciente del campo de fuerza de Tito Estif. Si Microsoft hiciera algo así…
Safari no es la web. Es la web móvil. Si fuera «la web» no habríamos visto esa proliferación de sitios «adaptados para el iPhone», ¿de acuerdo? ¿Razones? Yo propongo dos principales: la primera, esos 320 píxels de resolución horizontal, y la segunda, la ausencia de Flash.Donde dije digo… Safari no es la web, cierto, pero se le parece mucho. Si se ve en Safari para OS X, se ve en Safari en el touch. Y si bien los 320 puntos son una limitación, el zoom a dos dedos y la capacidad para reorientar la página a voluntad son un remedio espectacular para la enfermedad… La ausencia del Flash, eso sí, no la comprenderé nunca. ¿Tendrá algo tito Estif contra Adobe?- La «user experience» será fantástica, pero a mí me costó lo mío entender, por ejemplo, dónde narices estaban los controles de volumen. Señor Jobs, tiene usted la interfaz de usuario más elegante del sistema solar, como mínimo, pero al resto de fabricantes el listón de la usabilidad se lo ponen un palmo más arriba. ¿Tan doloroso habría sido ponerle un control físico de volumen al cacharrín, por ejemplo? No habría quedado tan bonito, pero creo que voy a usarlo más que mirarlo (aunque sí es cierto que me voy a pasar unos días exhibiéndolo ;-) ). Y ya puestos, supongo que estará explicado en algún sitio pero ¿por qué narices no hay versión «landscape» de la página inicial?
- Señor Jobs, iTunes es precioso (y la tienda de iTunes desde el WiFi del cacharrito una auténtica pasada) pero para gestionar una buena biblioteca de música (léase, más de cuarenta gigas de música) es como un dinosaurio y, por tanto, debería haberse extinguido hace tiempo. Deme, por favor, una alternativa algo más ligera.
Otra cosilla: ¿habría costado tanto incluir un codec WMA? ¿De verdad? Ah. Que antes se corta una mano que incluir algo que proviene de Microsoft. Sí, claro, lo entiendo… Espero que usted también entienda que las horas que se ha pasado el portátil convirtiendo WMAs a AACs (y las horas que quedan), para mí, justificarían que me hubiese cobrado usted diez dólares más por incluir el dichoso códec. Cagüen los jardines amurallados (con perdón).
Eso sí, que nadie se llame a engaño: el iPod Touch es uno de los dispositivos con más factor «wow» de todos los tiempos :-D. Pero una arquitectura un poco más abierta lo habría hecho aún mejor…
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