Last.fm, haciendo amigos

Y buenos amigos, además. O cuando menos poderosos. Informa Reuters que last.fm, uno de los mejores destinos en la web si lo que se busca es música, acaba de firmar un acuerdo con Warner Music, la cuarta mayor discográfica del mundo, que permite a last usar todo el catálogo de Warner en sus radios personalizadas para sus quince millones de usuarios.

Dice la noticia, además, que last está en conversaciones con las otras tres grandes (Universal, Sony BMG y EMI) para firmar tratos similares. Igual las discográficas se están dando cuenta que dar difusión a todo su catálogo es una buena idea, y que las radios a medida como la de last son la mejor manera de aprovechar toda la fuerza de la cola larga y mantener en circulación ese inmenso patrimonio musical que son sus archivos y que ahora se dedica a acumular polvo…

Super Bowl: ni cola larga ni…

Que ya puede usted ponerse a pontificar las bondades de la cola larga. Que el 20% de los productos que antes ocupaba prácticamente todo el mercado ahora sigue siendo hegemónico, pero que los productos para minorías selectas, y no tan selectas, se hacen un hueco en el mercado gracias a los agregadores, a la optimización y la distribución digital. Que los «meganichos» le pueden permitir a uno forrarse atendiendo a comunidades muy especializadas. Que…

Ya. Y entonces llega la Super Bowl. El acontecimiento televisivo estadounidense del milenio. Como cada año. Y esta vez, va y rompe los audímetros. Hasta 93 millones de teleespectadores, este domingo, sólo en Estados Unidos. El tercer programa de televisión más visto de todos los tiempos en aquel país. Siguiendo a otra Super Bowl (la del 96). Muy lejos del ‘top’ de la lista, eso sí, el episodio final de M*A*S*H, en 1983, con la friolera de 106 millones de espectadores (en un país que, además, tenía unos cuantos millones menos de habitantes).

Y es que, de vez en cuando, a casi todos nos gusta comportarnos como dóciles miembros del rebaño, y enviar a los nuevos medios a pastar un rato, nunca mejor dicho…

WalMart, películas para descargar de todas las grandes

Pues no ha sido iTunes la que se ha llevado el gato al agua en esta ocasión. WalMart es una gran cadena de tiendas en Estados Unidos con fama de ofrecerlo todo todo y todo, barato barato barato. Y acaban de anunciar que en su servicio en línea de descarga de películas van a ofrecer contenidos de las seis grandes productoras cinematográficas norteamericanas, más productos televisivos de la Fox. Algo que no había conseguido nadie hasta ahora. Todo parece indicar que la limitación digital de derechos vendrá con la marca de Microsoft y que no habrá manera de quemar las películas a DVD.

Los precios, además, no son como para tirar cohetes: de $12.88 a $19.88 el día del lanzamiento, a partir de $7.50 para las pelis de catálogo y los episodios de televisión a $1.96. Según la fuente, las descargas tendrían precios muy similares a los del DVD en la tienda. Es decir, seguimos con la tendencia de exprimir al consumidor todo lo que se pueda: no quemamos un DVD, no gastamos espacio de almacenamiento, no gastamos en transporte… y le pasamos al consumidor un ahorro de menos del uno por ciento. Y luego se preguntan por qué estas nuevas iniciativas no triunfan. Con un modelo de «compra un producto sin caja, sin la posibilidad de quemarlo a DVD, pásate unas cuantas horas para bajarlo y… ¡ahorra el uno por ciento!», la verdad es que me pregunto quién es el genio de marketing detrás del asunto y si va a haber alguien que compre más allá de los que vivan a 500 kilómetros de la tienda más cercana…

Para los que se pregunten porqué ha gandao la carrera WalMart, una marca que no tiene prácticamente presencia fuera de norteamérica… Pues bien, la cuestión es que dentro de norteamérica son el mayor vendedor de DVDs (y de un montón de otras cosas), con lo que están en una fantástica posición de «negociación» con las majors, que corren el riesgo de quedarse sin su mejor canal de distribución de DVDs si irritan al coloso.

En fin. Vía.

PS Una mala noticia: WalMart ha decidido volver a los viejos tiempos del «sólo para Internet Explorer», y su sitio hace daño a la vista con Firefox. Lo cuentan en TechCrunch.

Gracias, señor copyright (o no)

Error en una página de MTV: el copyright les impide distribuir un videoclip fuera de Estados Unidos

La culpa no es de MTV. Siendo estrictos, ni siquiera del copyright. Más bien de la falta de vista de algún abogado de alguna discográfica. Y es que después de leer en un blog de las maravillas del último clip de TV On The Radio (el insomnio tiene estas cosas) he seguido el enlace propuesto para verlo. Curiosamente, no iba a YouTube, sino a una página de MTV que, desafortunadamente, no está autorizada a distribuir el clip fuera de Estados Unidos. Y eso que uno podría llegar a pensar que los videoclips estaban hechos para promocionar la venta de discos y que cuanta más distribución se les diera, mejor para las bandas y, sobre todo, las discográficas…

Más de televisiones y YouTube

?ltimamente cuando mencionamos alguna cadena de televisión y sus acciones con respecto a YouTube y similares, la cosa suele ser «una de cal y una de arena». Yo nunca he sabido cuál era la buena (la cal o la arena, quiero decir) pero esta vez se trata de la mala. Y es que a alguien se le ha ocurrido cometer el «pecado capital» de subir a YouTube algún que otro capítulo íntegro de un par de series de la Fox (24 y Los Simpson, para ser exactos). En el caso de los episodios de 24, en particular, lo especial es que aparecieron en YouTube antes de ser emitidos por la cadena, procedentes de alguna red P2P. El canal americano, como era de esperar, tristemente, se ha puesto en contacto con la empresa propiedad de Google para que retiren los vídeos pero, no contentos con ello, les han exigido, con permiso del juez, que identifiquen la IP del usuario con el más bien poco noble fin de identificarlo y emprender acciones legales en su contra. Otra demostración de poca inteligencia (si alguien cree que demandar a un fan que se toma tantas molestias sin compensación es inteligente, que me lo explique, sobre todo si tenemos en cuenta que es altamente improbable que dicho usuario coincida con el responsable de la filtración inicial de los episodios, o ni siquiera conozca a ese filtrador). Vía.