15M vs Wikipedia

¿En qué se parecen #15M y Wikipedia?

  1. Ambos son movimientos grassroots.
  2. Antes de aparecer, nadie ‘en su sano juicio’ los había visto venir.
  3. Al enterarnos de que habían aparecido, muchos (me incluyo) pensamos que era todo muy bonito pero que se la iban a pegar. En breve. Espectacularmente.
  4. Ambos se enfrentan en su nacimiento a un ‘establishment‘ aparentemente inamovible.
  5. Si triunfan, el mundo será un lugar mejor (con contadas excepciones: lo peor del ‘establishment‘ imperante).

¿En qué se diferencian #15M y Wikipedia?

10 años después del nacimiento de Wikipedia, podemos afirmar que ha sido una revolución en la distribución de conocimiento. Más que ‘podemos afirmar’, de hecho, sería ‘nadie puede negar’. Por mucho que les pese a las Encyclopedia Britannica del mundo (por no hablar de Encarta), es imposible competir con ánimo comercial con algo así, aunque se parta con siglos de ventaja (y con una ventaja inicial de muchas ceros en la cuenta corriente). El ‘establishment‘ ha abdicado y asumido su nuevo papel en el mundo.

Dentro de diez años, muchos recordaremos el 15M como un momento histórico. Necesario. Y los que lo miramos desde lejos, con incredulidad primero y con admiración después, estaremos agradecidos por el enorme esfuerzo a los que le dedicaron su tiempo y dinero. Pero, al menos tal y como parece que está la cosa ahora, si la situación ha cambiado para mejor dentro de diez años, el 15M habrá sido el embrión imprescindible, pero no el motor directo de ese cambio.

¿Por qué?

En mi opinión (ya se sabe, las opiniones son como los culos: todo el mundo tiene uno/a), hay dos características de la Wikipedia de las que carece 15M:

La primera es que Wikipedia es una meritocracia. Una meritocracia salvaje, incluso. No es difícil encontrar historias de miedo (algunas de ellas infundadas, pero es prácticamente imposible que lo sean todas) sobre la cantidad de sangre, sudor y lágrimas que hay que dejarse para llegar a ser ‘alguien’ en la comunidad de Wikipedia (mucho, muchísimo más sudor que sangre y lágrimas, desde luego: no se me pasen con las malas metáforas, que de eso ya me encargo yo). El valor no se le supone a nadie (ya he advertido antes del pronunciado riesgo de malas metáforas, ¿verdad?) y hay que demostrarlo cada día, durante muchos días, antes de poder soñar con adquirir responsabilidades.

La segunda es que Wikipedia es un sistema tremendamente robusto y escalable. Es inevitable ver por primera vez el botón ‘Editar’ de Wikipedia y no llevarse las manos a la cabeza:»esto se lo puede cargar el primero que pase por aquí… esto se lo va a cargar el primero que pase por aquí» (y no nos vamos a preocupar ahora de si el que se lo carga es por vandalismo o por desconocimiento). Y sin embargo, ahí tienen ustedes a Wikipedia. No vamos a contar cuántos ‘edits’ incompetentes y/o vandálicos padece al día, pero seguro que son muchos. Y sin embargo, resiste. Desde luego, ayuda la meritocracia. Pero sobre todo ayuda que la misma tecnología que permite participar a cualquiera también hace que corregir errores y actos vandálicos sea más fácil y rápido que cometerlos…

(También podríamos hablar, muy probablemente, de una ‘ética hacker’ que es común en origen a ambos movimientos y que, en uno de los dos casos, se ha diluido bastante.)

Ojo, que 15M tiene cosas que Wikipedia habría querido…

(…aunque quizá no le habrían resultado tan beneficiosas como podría parecer a primera vista.) Wikipedia tardó años en adquirir una masa crítica suficiente, años de crecimiento lento y oscuro en los que cualquier tropiezo la podría haber dejado en nada. 15M ha crecido muchísimo más rápido de lo que ninguno de los que comenzaron a moverlo podría haber sospechado. Para lo bueno (en el peor de los casos, a un país entero se le ha removido la conciencia, que ya tocaba, y con un poco de suerte la cosa redundará en un cambio real) y para lo malo (ojalá el éxito no mate al 15M, pero desde luego lo está estrangulando más de lo que me gustaría a mí).

Y por tanto…

…esperemos que la cosa siga avanzando. Sería una catástrofe que no lo hiciese. Va a haber decrecimiento en el 15M. Es inevitable. Ese decrecimiento puede ser alrededor del inmenso núcleo positivo que hay detrás de todo esto o puede que no. Si es que no, a esta nanoprimavera acelerada la enterrarán un nanoverano, un nanootoño y un gris nanoinvierno, y esto podría no ser más que un recuerdo dentro de demasiado poco tiempo. Ojalá no sea así. Y no puedo evitar pensar que, para que no lo sea, hay que fijarse en casos de éxito como el de la Wikipedia.

PS Disculpen que hable un momento de ‘mi libro’ (seré breve: pueden comprobar visualmente lo que va a durar este párrafo). Donde-dice Wikipedia bien-podría-decir ‘software libre’. Y de software libre va la entrevista del último número de Mosaic con Mitchell Baker, ‘chair’ de la Fundación Mozilla (la entrevista la firmo yo, sí). Me voy a permitir recomendar su lectura: muchos aspectos del éxito de Mozilla podrían (deberían) aplicarse a muchas otras comunidades.

PS’ Seguramente sobre a estas alturas, pero también me permito recomendar la lectura de unas cuantas aportaciones al respecto que reflejan muy bien mis opiniones al respecto: las de Ismael Peña en Sociedad Red y Antonio Ortiz en Error500:

La Britannica se pasa al wiki

No del todo, naturalmente, pero mucho, tal y como cuentan ellos mismos. Si no puedes vencer a tu enemigo… adopta sus métodos. Y es que en breve Britannica va a evolucionar y dar más relevancia a los usuarios. Por un lado está la red de expertos que siempre ha contribuido (y casi siempre de manera desinteresada) a la elaboración de la enciclopedia, a los que ahora se reconocerá dándoles un «hogar virtual» dentro del sitio desde el que promocionarse (ya tocaba, por otro lado) y colocar sus propios contenidos. Los usuarios «de a pie», por su lado, también podrán contribuir contenidos, en forma de «artículos, ensayos y presentaciones multimedia». El contenido será accesible para todo el mundo, pero sin el sello de certificación ?Britannica Checked?. Si los contenidos se incorporan al corpus de contenidos oficiales, se reconocerá la aportación en los créditos. La beta del nuevo servicio ya está disponible, si alguien quiere apuntarse. Ahora falta que les imiten los de la Espasa…

Uno se huele (mucho, muchísimo) que se trata más de una rendición que de un paso adelante tomado sin presiones pero, aún así, es un buen paso, digno de felicitación.

Vía.

Ya tenemos Britannica

Captura de la entrada sobre Julio César en la Encyclopedia Britannica

El otro día comentaba Michael Arrington en TechCrunch que Encyclopedia Britannica daba acceso libre a sus contenidos a los bloggers y, como es natural, hice mi inscripción, a ver si les servía un sitio en lengua castellana. Por lo visto, parece que sí, o sea que los que lo deseéis podéis inscribiros en britannicanet.com. Además del acceso a sus contenidos, el blogger de turno podrá enlazar artículos de la enciclopedia (el de Julio César, por ejemplo). Los visitantes del blog podrán seguir el enlace y leer el artículo sin más problemas, pero no seguir navegando por otras entradas sin identificarse como usuario o darse de alta y pagar la correspondiente cuota (el acceso, cuenta Arrington, cuesta 70 dólares anuales, si no consigues pasar el filtro blogger).

¿Huida adelante de Britannica? Probablemente. Luchar con lo gratis es difícil, y más si el producto gratuito es competitivo, como es el caso de la Wikipedia (véase la entrada de Julio César en la Wikipedia anglosajona, compárese e inténtese justificar el pago de los 70 dólares…). Aún así, nadie puede negar la calidad de la Encyclopedia Britannica y no deja de ser un paso adelante.