Adobe sigue posicionándose en el mercado de herramientas de desarrollo de aplicaciones para móviles y otros dispositivos «no convencionales». Esta vez se trata de un par de anuncios:
- Por un lado, el Adobe Mobile Packager, una aplicación de escritorio (aún en prerelease) que permite empaquetar archivos SWF, un comprobador de versiones de Flash Player, un icono y metadatos para dispositivos con sistemas operativos Symbian o Windows Mobile, de manera que el proceso de instalación de aplicaciones sea el ‘de toda la vida’ para esas plataformas.
- Por el otro, el Flash Lite 3.1 Distributable Player que es, precisamente, eso: un ‘runtime’ redistribuible que podemos empaquetar con nuestras aplicaciones de forma que podemos obviar la necesidad de que el móvil del cliente tenga instalado Flash Player, pagando el cada vez menor precio de aumentar el peso del paquete a distribuir e instalar.
El objetivo, obvio, comprensible y previsible, de Adobe, es disponer de una plataforma equivalente a Air, pero para móviles: toda la autoría y programación con herramientas de Adobe y un proceso de ‘write once, package many times’. Esto hace cada vez más atractiva la ‘plataforma Flash’ (esto es, Flash y Flex y aditamentos como el futuro Flash Catalyst (el artista anteriormente conocido como Thermo)) para el desarrollo de aplicaciones conectadas y/o sincronizables y ricas en contenido multimedia, generado, cómo no, con las otras herramientas de la casa: Photoshop, Premiere, After Effects…
No es seguro que la apuesta funcione, por múltiples motivos…
- El primero, que hay que convencer a los desarrolladores «clásicos» que las herramientas de Adobe son válidas. Flex ya lleva unas cuantas iteraciones y cosas como el uso de Eclipse como entorno de desarrollo deberían ayudar, pero hay una mucha inercia contra la que luchar.
- La competencia no es manca: cierto es que Silverlight de momento no es más que una mota de polvo en la pantalla del radar, pero obviar los esfuerzos de Microsoft en un campo tan jugoso equivaldría al suicidio. Los de Redmond, además, aunque ‘no existen’ en el campo, cuentan con la inercia de una masa innumerable de desarrolladores muy acostumbrados a sus herramientas, a los que Microsoft seguirá tratando con el esmero habitual de la casa.
- En los dispositivos móviles, les falta la joya de la corona, el iPhone. De momento el ‘pique’ de Apple contra Adobe y la no inclusión de un Flash Player en el smartphone que ha roto todas las barreras de adopción tiene que estar doliendo mucho por San Francisco. De todas formas, parece que Adobe ya tiene desarrolladísimo su Flash Player para iPhone y eso significa, con los nuevos anuncios, que solo necesitan añadir un empaquetador que escupa código para iPhone (y iPod Touch) y colar unas cuantas aplicaciones (esto último igual les cuesta más…) para ser también una herramienta viable en el mundo de ‘tito Estif’.
Si les sale, puede ser la carambola de la década, al menos: una única suite capaz de producir todos los recursos y escupirlos para, a todos los efectos prácticos, todas las plataformas del mercado: Windows, Mac, Linux, la web, Symbian, Windows Mobile y iPhones y familia…