¿A dónde ha ido mi tuit?

Visualización de la cadena de retuits de un tuit
El camino del tuit es inescrutable…

De interés, básicamente, para tuiteros populares y estudiosos del social media, Where Does My Tweet Go? responde, con precisión, a esa pregunta: ¿por qué un tuit se ha vuelto viral de golpe? Para los que tengáis decenas de miles de seguidores, conseguir que un tuit se retuitee docenas y docenas de veces, y que los enlaces que ponéis sean visitados hasta alcanzar magnitudes de efecto Barrapunto quizá no tenga más misterio, pero para el otro 99% las cosas no suelen suceder así y ver qué ha pasado puede resultar un ejercicio, cuando menos, curioso :-)

+1: Google se ‘feisbuquifiza’ más…

Captura de pantalla. La herramienta Google +1 pide permiso para usar mis recomendaciones en
Va a ser que no...

Qué poco me gusta ‘+1’, el último lanzamiento de Google…

De entre las cosas que no me gustan de Facebook destaca el uso indiscriminado del ‘me gusta’. Me horroriza acceder a una web y ver cómo me saluda la cara de alguno de mis «amigos» porque en algún momento le dio al ¿inocuo? botoncito ‘me gusta’ de marras…

Pero debe ser (lo es, seguro) bueno para la cuenta de resultados, porque Google lo acaba de calcar, como anuncian en su blog. Lo llaman ‘+1’, pero es exactamente lo mismo: haz clic una vez, usaremos públicamente esa información en nuestro beneficio en todo tu grafo social.

Captura de pantalla que muestra cómo queda el botón '+1' en un resuyltado de búsqueda. En este caso, los resultados son este blog y páginas asociadas
De hecho, dudo que haga clic ni siquiera en mis webs...

Google, como siempre, es bastante más cuidadosa que Facebook al lanzar algo así: lo va a comenzar a lanzar poco a poco con usuarios radicados en Estados Unidos y que usan el inglés como lengua del interfaz (aunque, como podréis deducir de la captura, basta con tener la interfaz en inglés para poderlo activar en google.com/experimental). Y tanto la página de presentación del servicio como la que contiene la política de privacidad son bastante informativas, además de ser, de momento, un programa ‘opt in’.

Aún así, me parece una pésima idea, especialmente porque, si nada lo impide, dentro de poco estará disponible para todos los usuarios (con perfil Google) en todos los resultados de búsqueda y, tarde o temprano, alguien se va a hacer daño con esto.

New media literacies

¿Alfabetización en nuevos medios? No me gusta la traducción pero tendrá que servir, de momento. newmedialiteracies.org es un proyecto con el sello de los Comparative Media Studies del MIT, bajo el liderazgo de Henry Jenkins (aunque no por mucho tiempo), bastante más allá de la alfabetización digital… Muy interesante, e intentando dar respuestas a muchas preguntas que se abren a demasiada velocidad.

Vía.

Mars Twitterin’

El mensaje final de @MarsPhoenix, en binario: 01010100 01110010 01101001 01110101 01101101 01110000 01101000
El mensaje final de @MarsPhoenix

Si quisiera montar algo alrededor del ‘social media’, probablemente hablaría con Victoria McGregor, de la NASA. Sí, la NASA. Porque resulta que Veronica es la voz detrás de @MarsPhoenix o, lo que es lo mismo, la extensión en Twitter de la sonda Phoenix Mars Lander (de la que ya hemos hablado por aquí), con sus 38,754 ‘followers’ (más toda la gente sin cuenta en Twitter que visita la página).

Para los que quieran saber más, la entrevistan en Universe. Tres perlas…

  • ¿Viral? 3,000 seguidores el día de la llegada a Marte. 6,000 al día siguiente. 9,000 un día más tarde. Y esos in hacer spam, ni prácticamente promoción, fuera de unos cuantos blogs dedicados al espacio y la astronomía.
  • ¿Por qué en primera persona? Por motivos de espacio: dada la limitación de 140 caracteres de Twitter, es mucho más eficiente decir «I am…» que «Mars Phoenix is…».
  • ¿Recuerda Phoenix a Wall·E? No. Wall·E recuerda a Phoenix: los animadores de Pixar se dieron un paseo por el JPL para inspirarse antes de crear a Wall·E.

Bloggers y confianza

Da gusto que te hagan el trabajo…

Hace unos días Jeremiah Owyang, analista senior de Forrester Research se hacía eco en su blog de un informe de su compañía: «sorprendentemente» el consumidor se fía más, a la hora de hacer una compra de su perro que de ‘un blogger’. Para ser exactos se fían más de amigos o conocidos usuarios del producto, críticas en medios de comunicación, la información del fabricante, «expertos conocidos», «consumer reviews» y otra serie de fuentes más que de «un blog». No me digas. ¿Sabes qué? Yo, blogger, también. Pero si se trata de un móvil y la crítica es de Engadget, pongamos por caso, probablemente le haga mucho caso. Porque son expertos conocidos y, si me apuras, mejores medios de comunicación que muchos (aunque no todos, desde luego) medios de comunicación. Si un blogger que conozco, aunque no sea experto en la materia, se toma la molestia de opinar públicamente de un producto que me interesa, tanto para bien como para mal, tenga usted por seguro que su opinión quedará grabada en mi memoria. Y es que los resultados de Forrester, tal y como se presentan, son de una demagogia rayana en lo ridículo. Ciertamente, no me fiaré de un comentario oído al azar, en el metro, sobre un producto. Estoy convencido (llámenme iluso) que si pongo a parir un producto en OBM, algún lector habitual (haberlos haylos) lo tendrá en cuenta antes de hacer una compra. Y es que no se trata, en ningún caso, de comparar la crítica de un medio especializado con la opinión de «un blogger», sino de la «un blogger especializado en el tema» o «un blogger en quien confío» (de la misma forma que es más que probable que no haga demasiado caso al crítico de cine del diario si habla de coches, ni a mi padre (lector esporádico de este blog, qué cosas) si me recomendase una novedad discográfica…).

De todas formas, lo que me enerva del tema es el obvio conflicto de interés: Forrester es una compañía que vive de «hacer opinión» y hacer valer su reputación y, en este caso, lo hace opinando sobre… «hacedores de opinión» y reputaciones. Saben aquello que dicen de la mujer del César, ¿no? Pues en Forrester parece que no conocen el dicho.

En cualquier caso, y antes de perder los nervios innecesariamente, vuelvo al inicio de la entrada: y es que da gusto que te hagan el trabajo y, en este caso, el que lo ha hecho es Joshua Porter en Bokardo (un blog sobre medios sociales en el que, estoy seguro, mucha gente confía más que en Forrester Research, por poner un ejemplo ligeramente malintencionado ;-) ), con Why people don?t trust ?bloggers?. Mucho más articulado y relajado que yo, se lo aseguro :-).

PS Y supongo que a nadie se le escapa la ironía de que el señor Owyang cuente todo esto… en su blog.