Las máquinas nos volverán idiotas

O no:

It’s hard to remember now, but many people back in the 80s totally freaked out about word processing. I recall professors worrying that it would make students write more sloppily, and even think more sloppily. The fluidity of cutting and pasting seemed intellectually suspicious. I even remember one of my TAs arguing — in a lovely foreshadowing of today’s fears that “the Internet is making us stupid” — that cutting and pasting would render our generation unable to craft a coherent argument, because the sheer slipperiness of digital prose, its slithy rearrangeability, would render our ideas and prose rootless, nonsequential, and flighty.

O, en traducción más o menos libre:

Ahora cuesta recordarlo pero muchos, en los 80, estaban asustadísimos por los procesadores de textos. Recuerdo profesores preocupados porque su llegada haría que los estudiantes escribiesen de forma más descuidada, e incluso pensasen de forma más descuidada. La fluidez de cortar y pegar parecía intelectualmente sospechosa. Incluso recuerdo a uno de mis ayudantes discutiendo —en una hermosa predicción de los miedos actuales de que «Internet nos está haciendo estúpidos»— que el cortar y pegar haría que nuestra generación no fuese capaz de elaborar razonamientos coherentes, ya que la naturaleza absolutamente resbaladiza de la prosa digital, la escurridiza posibilidad de reordenarse, dejarían sin raíces nuestras ideas y nuestra prosa, asecuencial y frívola.

No lo digo yo, naturalmente, sino Clive Thompson, en su blog. También comenta, después, que hay estudios que, de hecho, demuestran que los estudiantes brillantes hacen un uso más limitado del copia-y-pega que sus compañeros. Y es que, efectivamente, casi toda tecnología nueva tiene sus efectos negativos… aunque no conozco a nadie dispuesto a extirparle la capacidad de copiar y pegar a su ordenador.

Los humanos no podemos evitar ser un poco bipolares y pensar que todo es o blanco o negro. Y eso se lleva al límite en los medios de comunicación. Vaya a cualquier diario y busque artículos que hablen de internet, o cualquier otra cosa más o menos nueva (y cualquier tecnología de menos de 50 años de antigüedad es nueva, para los diarios…). Uno tiene la impresión de que los que proponen la tecnología, cualquier tecnología, como panacea son los pares, mientras que en los impares esa misma tecnología es el mal que acabará con la humanidad. La realidad tiene la puñetera manía de ser casi siempre un tono intermedio de gris, casi nunca blanca, casi nunca negra. Todas las nuevas tecnologías nos quitan algo. Todas nos aportan algo. Es fácil imaginar al primer profesor al que le pusieron una pizarra en el aula, hace unos cuantos siglos. Podemos jugarnos lo que haga falta a que o le entusiasmó o le pareció un horror, pero que no le dejó indiferente es prácticamente seguro. Pero las tecnologías que sobreviven tienden a darnos más de lo que nos quitan.

O sea que, por favor, la próxima vez que oigan a alguien con tendencia a la hipérbole, no le hagan demasiado caso (especialmente cuando sea yo).

Algunas ideas después de unas horas con un Galaxy Tab…

Pues eso. Me he pasado algo más de 24 horas ‘jugando’ con un Galaxy Tab. Un dispositivo genial. Ha habido que arrancármelo de las manos, de hecho…

24 horas no son suficientes para evaluar un producto. Pero sí para dar pie a unas cuantas reflexiones:

Añoro la ‘interfaz uña’
Será porque soy viejo. Y porque mi primera pantalla táctil fue la de mi Palm IIIx. Y funcionaba estupendamente no sólo con el puntero, sino también con la uña. No entiendo por qué se insiste tanto en las pantallas capacitativas para móviles. Ni para una cosa grande como un Tab. Muy mono el ‘pinch-to-zoom’, pero hasta ahora no he encontrado el caso en que un doble clic no sirva para lo mismo, sin obligarme a poner los dedazos en la pantalla. Lo sé: el mundo opina lo contrario. Pero eso nunca me ha impedido pensar que soy yo el que tiene razón :-P.
Where’s my killer app?!
Si tengo que enseñarle el Tab a alguien que no ha tocado un dispositivo similar antes, lanzo dos programas: el Angry Birds y el Google Sky View. Ambos espectaculares. Pero, teniendo en cuenta que servidor no es muy jugón y que, cuando está por ahí por la noche, suele ser bajo la capa de polución de Barcelona, ninguna de ellas es más que una demo, para mí… Ayer salió la app oficial de Google Reader, que también tiene su qué, pero no va a vender millones de dispositivos, la verdad. Después de soltar el Tab he vuelto a mi prehistórico N97… y no echo de menos ‘de verdad’ ninguna aplicación. Imagino (aunque no tengo ni idea) que en el lado Apple la cosa es bastante mejor…
El AppMarket es un follón
Y nada mejor para ilustrarlo que la propia app de Google Reader. Ahora mismo, si buscas ‘Google Reader’ en el Market… esta no es ni el primer ni el segundo resultado. Se supone que a Google se le da bien organizar la información del mundo. Va a ser que aquí no lo demustran. Hay cosas como AppBrain que mejoran el panorama, pero a un usuario poco experimentado le pueden colar un gol detrás de otro sin demasiados problemas. De nuevo, imagino (de nuevo, sin tener ni idea) que en los dispositivos iOS la cosa funciona mejor. Dicho lo cual…
El caos tiene sus puntos positivos
Mi opinión actual es que un ‘app market’ riguroso y bien ordenado (al estilo Apple) tiene todo el sentido del mundo. Y que es la mejor receta para la inmensa mayoría de usuarios. Pero cuando te compras un ordenador deberías poderle instalar lo que te dé la gana y cualquiera debería poder desarrollar lo que le parezca para cualquier cacharro. Apple parece moverse en esa dirección para OS X (toquemos madera para que no acaben haciendo del App Market la única solución para distribuir software). Creo (i) que debería hacerlo también con iOS, con un ‘jailbreak’ legal (aunque también entiendo que es algo extremadamente difícil de hacer) y que (ii) Android también debería mover pieza en ese sentido (parece que están en ello, pero deberían correr más).
Las 7″ tienen sentido
Y las 5″ del Dell Streak, imagino que también. La decisión de Apple de elegir los dos «sweet spots» de las 4 y las 10 pulgadas, en los dos extremos del segmento, me parece una estrategia de mercado fantástica. Pero de ahí a afirmar que los tamaños intermedios no tienen sentido, va un trecho… Podría equivocarme (ha pasado antes), pero me da la impresión de que por este camino Apple va a seguir siendo el fabricante que mejor ejecuta, más unidades vende, más beneficios genera y mejor satisfacción de usuario obtiene, pero que los dispositivos Andoid ganarán en número a los iOS. Apple ya se vio en esta tesitura con los Macs vs Windows. Y han aprendido a vivir siendo menos en número pero siendo los reyes absolutos de sus categorías y les parece fantástico (sólo faltaría, con los números que tienen). Y hay que felicitarles por ello.
Este es un mundo de manzanitas
Nadie me acusará de ser fan de los de Cupertino. Y se supone que estoy hablando del Tab. Pero me resulta imposible hacerlo sin hablar de Apple. Y, además, nadie puede mirar el Tab (o el Galaxy S, ya puestos) y no pensar que el diseñador quiere ser Jony Ive cuando sea mayor. Nadie.
¿¡850 euros!?
No sé quién le ha puesto ese precio al Tab. Ni por qué espera que venda mucho a ese precio. En Amazon UK, ahora mismo, lo tienen a 450 libras. Con un ‘descuentillo’ del 44% sobre las ochocientas libras del precio oficial por las islas. Eso representa un pelo más de 530 euros. Casi razonable. Si no se compara con los 500 euros del iPad de gama más baja. Opino que no están en el mismo nicho, pero que el público percibe el iPad como un producto de gama superior pero que puede llegar a ser más barato, en la configuración más básica. Y eso va a doler. Dice la última nota de prensa de Yoigo que lo va a sacar por 250 euros con un plan de datos de 25 euros y compromiso de permanencia. Podría ser la primera vez en la historia que me atrae más un producto vinculado a operadora que libre. Alarmante.

Efemérides 20N (1/2): ¡Windows!

Captura de pantalla de Windows 1
Ha envejecido... Obsérvense los 'astronómicos' 300 kilobytes de RAM y cerca de 30 megas de disco. Clic en la imagen para acceder a la imagen origianl, en la Wikipedia

Pues sí, un 20N, pero de 1985, se lanzó al mercado una cosa (bastante abominable, todo sea dicho) llamada Windows 1.0… Un par de apuntes sacados de la correspondiente entrada de la Wikipedia

  • El lanzamiento se había anunciado dos años antes. El Lisa ya existía, por aquel entonces, y el Mac estaba a punto de llegar (y fue lanzado antes que Windows, en 1984, de hecho). Hasta el añorado Amiga y el Atari ST llegaron antes (el mismo 1985). Y los tres eran notablemente mejores que Windows.
  • Como solía ser costumbre con Microsoft, hasta la tercera no fue la vencida: Windows 3 fue el primer Windows de verdadero éxito comercial (consiguió vender 2 millones de licencias en los primeros seis meses, allá por 1990; claro que hoy en día, de Windows 7 se han vendido CIEN millones de copias, en esos mismos seis meses).

En cualquier caso, ¡felicidades!

WorldWideWeb: Proposal for a HyperText Project

Qué velocidad. Ayer, 12 de noviembre de 2010, se cumplían 20 años de que un señor, de nombre Tim Berners-Lee, enviase un correo presentando un proyecto para elaborar una ‘cosilla’ en el CERN llamada ‘WorldWideWeb’… Como documento fundacional, hay unas cuantas constituciones y leyes por el mundo que probablemente sean más importantes, pero es difícil pensar en algo escrito en el siglo XX que haya tenido más importancia para la humanidad…

El documento original, WorldWideWeb: Proposal for a HyperText Project, puede consultarse en la web del W3C, pero he pensado que sería un buen ejercicio traducirlo y dejarlo aquí…

Como de costumbre, las advertencias habituales: a pesar de que es una traducción hecha con cariño, seguro que no está exenta de fallos (tenéis los comentarios para avisar de ellos :-) ). Y, en cualquier caso, siempre que sea posible, mejor acceder al texto original.
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En el mercado de smartphones, ganan todos…

…como si de unas elecciones se tratase (con la posible excepción de Research In Motion y sus Blackberrys).

Han salido los números para el tercer trimestre de 2010 de Gartner, y la cosa pinta bien para casi todo el mundo, por poco que se quiera ver el vaso medio lleno…

  • En tercer lugar del mercado tenemos a Apple, con más de 13 millones de dispositivos vendidos. Que puede ser que el tercer lugar ‘no mole’, pero vender 13 millones de unidades, cuando se tiene un catálogo con cuatro líneas (iPod Touch, iPhone 3GS, iPhone 4 y iPad) es como para hacerles un monumento. Y los beneficios que eso significa en Cupertino son de órdago e incomparables con los que pueda tener todo el resto del mercado.

  • En el dos está Android. Que con todos sus problemas con lo fraccionado que está su mercado, han colocado 20 millones de unidades, que se dice pronto. Y los fabricantes, aunque obviamente no pueden ni soñar con los números de Apple, pueden acceder al mercado ‘smartphone’ con costes decididamente bajos. Hasta los más adictos a la manzana deberían estar agradecidos: el acicate de Android para hacer avanzar los dispositivos iOS (y abrir un poco la política de Apple) es induscutible.
  • Y en el número uno, el cadáver más fresco de todos los tiempos: Nokia. Los fineses han puesto en circulación nada más y nada menos que 29 millones de móviles Symbian en el mercado. Nadie discutirá que hoy en día S60 es la gama baja de este segmento. Que ni S^3 les va a poner en la órbita de sus competidores. Que a Meego le queda una eternidad, que de momento no llega ni a incógnita y que, por muy bueno que sea cuando llegue, llegará tarde a un mercado con hasta cuatro alternativas entre sólidas y solidísimas. Pero aún así… veintinueve millones. Discuta usted con ese número.

Si uno quiere hablar de perdedores, desde luego hay dos:

  • Microsoft, que no llega a dos millones y medio de unidades, con un ridículo 1.5% de cuota. Pero claro. Acaban de lanzar Windows Phone 7…
  • Finalmente, RIM está un poco por debajo de los 12 millones y, desde el mismo trimestre del año anterior, ha perdido casi seis puntos de cuota.

Tres ganadores, un perdedor con producto nuevo acabado de lanzar y otro que, con la tontería, ha colocado doce millones de unidades… No está mal, el mercado…